Cambiar el nombre a las avispas invasoras para identificarlas mejor

8 Septiembre, 2022

El problema de las especies exóticas invasoras es lo suficientemente grave como para que no sea necesario caer en alarmismos innecesarios. Adjetivos como “peligroso” o “asesino” suelen aparecer en muchos titulares de noticas que hacen referencia a algún organismo invasor. Es lo que ocurre, por ejemplo, con varias especies invasoras de avispas. Precisamente, los términos “avispa asesina” o “avispa gigante asiática”, se emplean coloquialmente para referirse a varias especies distintas de estos himenópteros con lo que, aparte de alarmismo, se genera una gran confusión. Para resolver esta situación, la Sociedad Entomológica de América (ESA) ha tomado una decisión a la hora de denominar a varias especies de avispas consideradas exóticas en los EEUU. Como consecuencia de ello, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos ha seguido las recomendaciones propuestas por la ESA, para tratar de resolver esta importante confusión.

En primer lugar, debemos aclarar que actualmente en EEUU existen tres especies de avispas invasoras del Genero Vespa. Se trata de V. mandarinia, V. soror y V. velutina. Muy frecuentemente, en los medios de comunicación, cada vez que se cita a cualquiera de estas tres especies, se las designa con el término “avispa asesina”, “avispón gigante” o simplemente “avispa asiática”. Para tratar de diferenciarlas claramente, evitando al mismo tiempo el uso de términos poco adecuados y no definidos, la ESA ha decidido otorgarles un nombre común diferente a cada una de estas tres especies de avispas. Por ejemplo, a V. mandarinia, presente en el noroeste del país norteamericano desde hace ya algunos años, además de en determinadas zonas del vecino Canadá, propone nombrarla como avispa gigante del norte. Sobre esta especie ya hablamos en un post anterior, en el que se alertaba de la posible llegada de esta especie a Europa, lo que sería muy perjudicial para el sector apícola; además de que pueden llegar a provocar una dolorosa picadura. Como recordamos, a diferencia de los EEUU, actualmente no se tiene constancia de la presencia de V. mandarinia en Europa, por supuesto, tampoco en España.

Por otro lado, para V. velutina, desafortunadamente mucho más conocida en nuestro país, la ESA propone denominarla avispa de patas amarillas. Hasta ahora se la conocía en EEUU como avispa asiática, al igual que en España. Sin embargo, el origen asiático de las tres especies, hace necesaria una diferenciación. De tamaño menor que V. mandarinia, la velutina, además de por su patas amarillas, puede reconocerse perfectamente por su coloración más oscura. Como ya hemos hablado en numerosas ocasiones de este insecto invasor, poco más podemos añadir sobre él.

En último lugar, la ESA ha decidido otorgarle a V. soror el nombre de avispa gigante del sur. Su área de distribución natural incluye el norte de Tailandia, norte de Vietnam y partes del sur de China. Su presencia en EEUU y Canadá está confirmada desde, al menos, el año 2019. Al igual que la recién nombrada avispa gigante del norte, sus nidos son típicamente subterráneos, a diferencia de las velutinas. Son también depredadores agresivos que atacan colmenas de abejas, avispas, además de otros insectos como mantis, libélulas, mariposas, saltamontes e incluso pequeños vertebrados como los gekkos.

Como hemos comentado, el objetivo de esta iniciativa de la ESA es la de evitar nombres que generen prejuicios y un cierto alarmismo. Esos cambios en la denominación de estas tres especies de avispas se enmarcan dentro del proyecto científico “Mejores nombres comunes”, que trata de evitar la utilización de nombres, para referirse a especies, que contengan términos degradantes, referencias geográficas inapropiadas para organismos invasores o nombres que no tengan en cuenta la nomenclatura que éstos reciben en sus lugares de origen. La ESA cree que “avispa asesina” o “avispa gigante asiática” incumplen precisamente las directrices de este proyecto y de ahí los cambios de nombres propuestos. Se trata eso sí de una recomendación, puesto que no existe una normativa específica que regule los nombres comunes de las especies. Sin embargo, la ya comentada decisión del Departamento de Agricultura de los EEUU, de tomar en cuenta dichas recomendaciones, le otorga cierta validez. Más allá de los cambios de nombre, debemos recordar la importancia del control de estas plagas invasoras, puesto que su impacto ecológico y económico puede resultar enorme.