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Plaga de orugas en Cantabria

Oruga cuya plaga está afectando a varias localidades de Cantabria

13 Octubre, 2016

Estamos viviendo un final de verano y un comienzo de otoño un tanto atípico en toda España. A las elevadas temperaturas, no muy propias de estas fechas, se le une una escasez notoria de precipitaciones. Todo esto afecta considerablemente el comportamiento de muchos organismos, y en especial, el de los insectos plaga. El retraso de la llegada de temperaturas más bajas, alarga el ciclo de muchas especies, pudiendo incrementarse el número de generaciones anuales; y volviéndose sus poblaciones más abundantes. Para las empresas del sector de control de plagas no deja de ser una buena noticia, puesto que nos proporciona bastante trabajo; pero para aquellos que sufren los problemas de plagas, no tiene que ser muy agradable.

Un ejemplo de ello lo están viviendo estos días los vecinos de varias localidades situadas en Cantabria. Una plaga de miles de orugas ha tomado las calles de San Román, Barreda, Camargo o Polanco, entre otras poblaciones, haciendo la vida más difícil a sus ciudadanos. Estas larvas cubren calles, caminos, tapias, etc.; llegando incluso a penetrar en el interior de las viviendas. Los vecinos de estos municipios viven preocupados por esta situación. Además de la desagradable visión de tantas orugas invadiéndolo todo, temen que éstas pudieran tener algún tipo de incidencia en su salud o en la de sus mascotas, tal y como ocurre con los juveniles de la procesionaria del pino (Thaumetopoea pityocampa). Por ello, recurren a insecticidas domésticos y todo tipo de métodos caseros, además de dar parte a las autoridades competentes; sin que por el momento nada haya dado resultado.

Según la Conserjería de Medio Rural, Pesca y Alimentación del Gobierno de Cantabria, se trata de la oruga defoliadora del maíz, también conocida como rosquilla (Mythimna unipuncta). Estos lepidópteros pertenecen a la Familia Noctuidae. Las larvas son de color variable, aunque normalmente presentan una coloración entre verde y marrón, con bandas dorsales longitudinales claras y otra franja longitudinal más ancha y amarillenta a cada lado del cuerpo. Miden entre 30 y 40 mm. Las mariposas adultas, de unos 40 mm, presentan alas anteriores de coloración marrón rojizo, con un característico punto blanco en el centro del ala; mientras que las posteriores son grisáceas.

Suelen pasar el invierno en forma de crisálida, iniciando su ciclo en mayo, con el vuelo de los adultos para su reproducción, y finalizando éste en octubre. Tras la eclosión de los huevos, pasan por entre 5 y 6 estadios larvarios en unos 30 días, para posteriormente pupar en el suelo. Transcurridos entre 7 y 14 días, emergen de nuevo los adultos. De esta forma, las generaciones (hasta 4 anuales) se suceden hasta el otoño, momento en el que vuelven a invernar.

Estas orugas son inofensivas para las personas; aunque sí constituyen plaga para determinados cultivos como el maíz, el arroz y otras gramíneas como los cereales, además de para el césped ornamental y los pastos. Mientras que los adultos se alimentan de néctar y polen de las flores, las larvas son defoliadoras, mordiendo las hojas por los bordes y dejando únicamente el nervio central. Concretamente en el maíz, los daños pueden llegar a ser muy graves.

Para su control, puede llevarse a cabo tratamiento químico, aunque para que éste resulte efectivo, como siempre decimos, deberá realizarse durante los primeros estadios larvarios, cuando las orugas son más sensibles. También se pueden realizar tratamientos con Bacillus thuringiensis. La monitorización de sus poblaciones, mediante trampas de feromonas, resulta imprescindible para determinar el momento exacto en el que aplicar estos métodos.

Por tanto, no estamos ante un hecho inexplicable, aunque no se dé con mucha frecuencia. Se trata de un insecto que se encuentra habitualmente en esta zona, pero cuyas poblaciones se han visto disparadas dadas las condiciones climatológicas particulares. Dentro de unos días, todas las orugas se convertirán en mariposas y los vecinos dejarán de convivir con estos molestos invasores.