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El fin de la insólita plaga de Fresnedo

Macho adulto de Lymantria dispar, plaga forestal

13 Marzo, 2015

Los bosques comunales de las localidades de Fresnedo y Villanueva, en la comarca de El Bierzo, provincia de León, llevan desde el año 2012 sufriendo una insólita plaga. Sus pinares se han visto atacados por la conocida como lagarta peluda. El caso es curioso porque las larvas de esta mariposa no suelen alimentarse de pinos, sobretodo de la especie Pinus radiata, muy abundante en la zona, sino más bien de frondosas. Sin embargo, en esta localidad, se han visto afectadas más de 140 hectáreas de pinares; un hecho que sólo tiene dos precedentes a nivel mundial, en Pontevedra y Portugal, a mediados y finales del siglo pasado.

En un principio la situación no parecía grave, puesto que las plagas de lagarta peluda suelen tener un ciclo de unos tres años y sus efectos no son letales. Sin embargo, en este caso, los pinos quedaban tan debilitados que llegaban a morir. Y es que los datos que se tenían hasta ahora de este insecto nocivo, estaban basados en la incidencia sobre sus hospedadores habituales (encinas, robles, alcornoques, etc.). Es por ello que las entidades locales firmaron un convenio con la Universidad de León para estudiar este fenómeno y tratar de conocer sus causas.

Esta semana se han presentado las conclusiones de este trabajo científico, en el que se ha podido determinar que el inicio de la plaga tuvo lugar el verano de 2012, debido a que el año anterior, 2011, había sido más cálido de lo normal, lo que aumentó la población de la mariposa. A esto se unió que la primavera de 2012 también fue más cálida y seca, lo que terminó por originar una explosión demográfica en 2013. Por otra parte, en laboratorio, se ha constatado que las larvas de la especie que se alimentan de acículas de pino engordan más rápido y crecen más que aquellas que lo hacen con sus alimentos tradicionales (hojas de encina, roble o chopo). Esto, junto con algunas alteraciones observadas en su ciclo, llevó a pensar que quizá se trataba de una nueva especie; o incluso que podía tratarse de una variedad mucho más destructiva de origen asiático. Sin embargo, un análisis genético ha determinado que se trata de la misma especie ya conocida en nuestras latitudes.

El estudio refleja que en el año 2014 la población de lagarta peluda colapsó de forma natural, consecuencia de la aparición de depredadores y parasitoides de huevos y orugas principalmente, que o bien no estaban presentes previamente en la zona o se volvieron mucho más abundantes debido a la gran disponibilidad de recursos. En la actualidad, puede decirse que la situación de plaga ha sido superada.

La lagarta peluda (Lymantria dispar) es un lepidóptero de la familia Lymantriidae, típica del centro y sur de Europa, Asia y norte de África, aunque también ha sido introducida de manera accidental en Norteamérica, donde está causando enormes problemas. Posee una única generación anual y su ciclo se inicia en el mes de agosto con la puesta de huevos, estado en el que pasan el otoño y el invierno, hasta que a finales del mes de marzo aparecen las primeras orugas. Éstas, tras seis fases larvarias en el caso de las hembras y cinco en el de los machos, pupan y finalmente emergen como adultos en el mes de julio.

Al tratarse de una especie autóctona, existen en la naturaleza los enemigos necesarios para mantenerla a raya. Sin embargo, cada siete años aproximadamente, sufren aumentos súbitos en sus poblaciones. Por eso, una vez más, adquiere especial importancia la realización del control de plagas de una forma integrada. Para ello es clave la monitorización y seguimiento de sus densidades poblacionales empleando trampas de feromonas. Cuando el umbral de tolerancia se haya superado, pueden hacerse cortas de los ejemplares más afectados, según una serie de parámetros que han sido determinados en el citado estudio. Otra posibilidad son los tratamientos con Bacillus thuringiensis o bien con productos inhibidores de la quitina, siempre en las primeras fases de desarrollo de las larvas, cuando éstas son más susceptibles. 

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