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¿Cómo se convirtió la cucaracha rubia en una de las peores plagas?

Cómo se convirtió la cucaracha rubia o alemana en una de las peores plagas

5 Enero, 2022

La cucaracha rubia o alemana (Blatella germanica) es el paradigma perfecto de plaga que afecta a los seres humanos. Se trata, sin duda, de uno de los organismos nocivos que mejor representa los inconvenientes y efectos negativos que tiene su presencia en nuestras vidas; por tanto, uno de los organismos con los que las empresas de control de plagas urbanas tratamos con mayor frecuencia. Pero, ¿cómo se convirtió este pequeño insecto en una de nuestras peores plagas? Existe una teoría que explica el origen y evolución de estas cucarachas como una de las peores plagas en viviendas y establecimientos. La exponemos a continuación.

El autor de esta teoría es un entomólogo estadounidense, William H. Robinson, con una amplia experiencia en el control de plagas. Sus elucubraciones han sido recogidas en un artículo de la revista Pest Control Technology. Según el investigador, el origen de la cucaracha rubia estaría en el interior de las cuevas calizas ubicadas en la isla de Borneo, Malasia. Dichas cuevas mantienen unas condiciones adecuadas de humedad y temperatura para estos insectos durante todo el año. De hecho, en la actualidad todavía pueden encontrarse allí otras especies de cucaracha relacionadas con el Género Blatella. Las cavidades han sido históricamente utilizadas por las personas para diferentes usos, dando origen así a esta estrecha y negativa relación entre humanos y cucarachas.

Se da la circunstancia de que en el estado malasio de Sarawak, al noroeste del país, estas cuevas calcáreas se han utilizado desde hace siglos como almacenes de pimienta. Esta especia tan apreciada se mantenía conservada gracias a las condiciones estables y favorables del interior de las cuevas, donde también habitaban nuestras protagonistas. Gracias al auge del tráfico de especias y al comercio marítimo, allá por el siglo XVI, las cucarachas pudieron viajar, desde el interior de las cuevas hacia Occidente, alojadas en sacos y barriles que contenían estas valiosas mercancías, trasportadas en las bodegas de los barcos. ¿Pero cómo pudieron sobrevivir a este viaje? El autor lo explica gracias a sus increíbles capacidades de resistencia. Hay que tener en cuenta que las hembras de cucaracha alemana pueden sobrevivir hasta 12 días sin comida ni agua, y hasta 42 días sólo con agua. Además, en condiciones desfavorables, las ninfas pueden detener su desarrollo. Teniendo en cuenta que estas hembras pueden vivir hasta 6 meses y producir ootecas con un solo apareamiento, se entiende perfectamente su capacidad de proliferación en interiores y la facilidad con la que conquistaron hogares y establecimientos de todo el mundo.

Pero entonces, si su origen es asiático, ¿por qué se la denomina cucaracha alemana? Una vez que las cucarachas se establecieron en los almacenes de especias europeos, un entomólogo danés, Martin Brunniche, recolectó algunos ejemplares y envió varios de ellos al conocido padre de la taxonomía moderna, Carlos Linneo. Corría el año 1767 y Linneo nombró a estas cucarachas como Blatella germanica, puesto que los individuos recolectados por su colega procedían de puertos del norte de Alemania.

Desde Europa, la cucaracha rubia desembarcó en América y así pasó a convertirse en una plaga cosmopolita. Sin embargo, en un primer momento, las infestaciones por este insecto no fueron frecuentes. Su auge como organismo nocivo global tuvo que esperar hasta el siglo XIX, con la introducción de los sistemas de distribución de agua en el interior de los edificios y, sobretodo, a principios del XX, con el inicio del uso de los refrigeradores eléctricos. Todo técnico en control de plagas sabe que el motor de un frigorífico es uno de los sitios clave para la proliferación de estos bichos, puesto que allí encuentra calor y humedad suficientes para su desarrollo.

Y esta es la historia de cómo un insecto habitante de cuevas se convirtió en una de las peores plagas urbanas. Ya lo sabe, si sufre una plaga de cucarachas alemanas, pero también de cucarachas negras o de cucarachas americanas, en su vivienda, comunidad de vecinos o negocio, contrate los tratamientos profesionales de desinsectación que Biodal Control Ambiental ofrece en Madrid.