Contacte con nosotros

Especialistas en control de plagas. Resultados garantizados, al mejor precio.

Especial Halloween: las no tan terroríficas arañas

¿Son peligrosas las arañas? ¿Pueden constituir una plaga?

31 Octubre, 2020

Noche del 31 de octubre, víspera de la Festividad de Todos Los Santos, el Día de Muertos o la cada vez más habitual en España Noche de Halloween. Durante estos días las calles se llenan de niños y jóvenes disfrazados. Muchos negocios y algunas viviendas lucen decoraciones típicas de esta celebración. Fantasmas, calabazas, murciélagos, etc., suelen ser los objetos más habituales. Entre los elementos empleados más frecuentemente para ambientar Halloween destaca un artrópodo que causa verdadero pavor en determinadas personas, las arañas, así como sus correspondientes telarañas. Pero, ¿de verdad son tan terroríficas? ¿Pueden ocasionar una plaga? De ellas hablaremos a continuación.

Las arañas, pertenecientes al Orden Araneae, son el grupo más numeroso de los arácnidos (Arachnida), donde se engloban también otros bichos, por lo general poco queridos, como los escorpiones, los ácaros o las garrapatas. Las arañas son muy numerosas, habiéndose descrito en la actualidad más de 45.000 especies diferentes, que habitan en todos los continentes a excepción de la Antártida. Todas ellas son depredadoras, por lo general solitarias, y poseen glándulas venenosas asociadas a sus quelíceros, es decir, sus apéndices bucales terminados en punta. También son capaces de fabricar seda que emplean para construir sus telarañas o redes de caza, para forrar sus nidos, proteger sus huevos o también para transportarse por el aire. Además de poseer ocho patas, a diferencia de los insectos que tienen seis, disponen a continuación de los quelíceros de otro par de apéndices denominados pedipalpos, con funciones táctiles y olfativas, muchas de ellas relacionadas con la interacción entre ejemplares. Su tamaño es también muy variable, desde apenas medio milímetro, hasta decenas de centímetros dependiendo de la especie. La araña más grande que se conoce es la sudamericana tarántula gigante o Goliat (Theraphosa blondi) que puede llegar hasta los 30 cm con sus patas extendidas y a pesar más de 100 g.

¿Son las arañas una plaga habitual? La respuesta es no. La mayoría de las especies viven en el exterior, aunque muchas de ellas sí que pueden introducirse en viviendas y otras instalaciones humanas buscando refugio y alimento. Entre las más habituales, nos encontramos con las de la Familia Pholcidae. Son muy abundantes por ejemplo en sótanos, donde se pueden alimentar de una gran cantidad de insectos. Por lo general, la entrada en las viviendas se produce de forma ocasional, siendo más frecuente a finales de verano y principios de otoño, especialmente en pueblos o lugares con entornos naturales próximos. Por tanto, lo que suele ocurrir es el avistamiento de ejemplares aislados, no generando su presencia prácticamente ningún aviso a las empresas de control de plagas.

¿Son peligrosas las arañas? La respuesta vuelve a ser no. A pesar de que tengan glándulas venenosas asociadas a sus mandíbulas, éstas están diseñadas para paralizar y pre-digerir a sus presas, por lo que intervienen en su alimentación. Es cierto que ciertas especies sí pueden suponer un problema a nivel médico en el caso de sufrir una mordedura. Las arañas más venenosas son los Géneros Atrax y Hadronyche, propios de Australia. La mayoría de especies que pueden verse en una vivienda, sobretodo en España, no tienen la capacidad de penetrar con sus quelíceros la piel humana, por lo que no pueden inocular ningún veneno. En la mayoría de las ocasiones, la picadura o mordedura de las arañas es accidental, por lo general con carácter defensivo, y produce efectos leves en su “víctima”. Si bien es cierto, como ocurre con otros muchos bichos, existen reacciones alérgicas en determinadas personas, que pueden provocar efectos más severos. En España ha habido varios episodios de histeria colectiva relacionados con la araña violinista. La especie presente en nuestro país es Loxosceles rufescens, que por lo general produce daños leves si llega a morder. No hay que confundirlas con sus parientes americanas del Género Loxosceles, que sí tienen un veneno más potente y que pueden provocar reacciones más peligrosas.

Por tanto, y a pesar de que en Halloween lo que se pretende es asustar, esperemos haber contribuido a mitigar la aracnofobia. Las arañas no constituyen plagas, son beneficiosas porque ayudan a controlar a los insectos y es raro que resulten peligrosas para el ser humano, sobre todo teniendo en cuenta que, aunque no nos guste, convivimos con ellas.