Estudiar las bacterias de las chinches de cama para controlar sus plagas

15 Abril, 2020

Una de las plagas emergentes por excelencia es la de las chinches de cama. Como sabemos, estos insectos hematófagos están causando numerosos problemas en la actualidad y su incidencia va cada vez en aumento. Junto con el elevado volumen de desplazamientos humanos en todo el mundo, estos incrementos en las plagas de chinches se deben, en parte, a fenómenos como las resistencias frente a los biocidas. Aunque existen técnicas alternativas al uso de químicos, como pueden ser los tratamientos en los que se emplea la temperatura y/o la humedad, es cierto que no existen demasiados avances a la hora de buscar otro tipo de herramientas para su control. En este sentido, una nueva línea de investigación, que se está desarrollando actualmente, puede abrir nuevas formas para combatir a estos insectos plaga.

La empresa francesa IZInovation junto con el Centre National de la Recherche Scientifique (CNRS) en Francia, están desarrollando una investigación que permita caracterizar la microbiota propia de la chinche de cama (Cimex lectularius). Esto implica llegar a conocer los microorganismos comensales, simbióticos y patógenos de las chinches de cama, así como las interacciones o las relaciones causa-efecto que se establecen entre ellos y el insecto. La finalidad es poder llegar a desestabilizar dichas relaciones, especialmente aquellas que intervienen en la alimentación de las chinches, para poder desarrollar herramientas que permitan su control.

La ingestión de sangre por parte de las chinches de cama es vital en varias fases de su ciclo biológico. En primer lugar, estos insectos pasan por hasta cinco estadios ninfales diferentes. Para poder pasar de una fase a otra deben mudar su cutícula o exoesqueleto, para lo cual es imprescindible que se alimenten de nuestra sangre. Lo mismo ocurre en su transición al estado adulto. Por otro lado, parece que la ingesta de sangre induce a los machos de las chinches a aparearse. Por supuesto, la alimentación es también clave en la producción de huevos por parte de las hembras. Cuanta más sangre consuman éstas, más huevos serán generados. Las hembras producen entre 1 y 7 huevos, en un periodo de tiempo de unos 10 días después de cada ingesta. Las hembras deberán alimentarse de nuevo para volver a producir huevos. Con todos estos aspectos se entiende perfectamente el por qué conocer a los microorganismos que permiten a las chinches digerir la sangre humana puede ser importante a la hora de desarrollar herramientas para su control. Alterando esta microbiota asociada, se estaría incidiendo claramente en la viabilidad y proliferación de las infestaciones de chinches de cama.

La misma utilidad tendrá el conocer los microorganismos patógenos que afectan a las chinches de cama. Por ejemplo, para otras plagas de insectos, como los mosquitos o la procesionaria del pino, se realizan tratamientos de control biológico mediante el uso de Bacillus thuringiensis. Un método similar a éste no se ha desarrollado para eliminar las plagas de chinches de cama. Bien es cierto que emplear microorganismos patógenos, para el control de plagas urbanas, puede provocar recelos en la ciudadanía; como ya analizamos en un artículo anterior. Aun así, el futuro desarrollo de herramientas de lucha biológica basadas en los patógenos de las chinches, puede ser una interesante opción a tener en cuenta, por ejemplo, para tratar las infestaciones más graves.

Al mismo tiempo que continúan con esta interesante investigación, las dos entidades francesas están desarrollando un proyecto a gran escala para caracterizar el mecanismo molecular responsable de la aparición de resistencias de las chinches de cama a los insecticidas, en entornos reales de campo. Esperan también ampliar la información sobre la biología y comportamiento de estos insectos plaga, además de conocer el grado de conocimiento que los técnicos profesionales de control de plagas tienen acerca de las chinches. Ni que decir tiene que, cualquier avance que permita contribuir en la lucha contra una de las plagas urbanas con mayor incidencia en la actualidad, es siempre bienvenido.