Autorizada nueva sustancia rodenticida complementaria a los anticoagulantes

29 Mayo, 2019

El de los rodenticidas anticoagulantes es el grupo de biocidas que más cambios normativos están sufriendo en los últimos tiempos. La reclasificación toxicológica de algunas de sus materias activas, ha revolucionado completamente el sector de los productos químicos empleados en el control de plagas de roedores. Como recordamos, en el año 2017 entró en vigor un reglamento europeo que reclasificaba ciertos anticoagulantes, con concentraciones iguales o superiores al 0,003%, a Tóxicos para la reproducción, limitándose su uso a personal especializado; el cual debe poseer además la capacitación necesaria para aplicar este tipo de sustancias. Este cambio normativo tan restrictivo, junto al fenómeno de las resistencias frente a determinadas materias activas como la bromadiolona que presentan algunos roedores, especialmente las ratas, está motivando la búsqueda de alternativas químicas que sean eficaces. En este sentido, la UE ha aprobado recientemente el uso de una nueva sustancia activa dentro del grupo de los rodenticidas.

Se trata del colecalciferol o vitamina D3. Su mecanismo de actuación es inducir una hipervitaminosis e hipercalcemia, es decir, aumentar el nivel normal de vitamina D en sangre, lo que a su vez provoca una elevación de los niveles de calcio en la misma, favoreciendo su absorción intestinal, la reabsorción renal y ósea. Todo ello induce efectos nocivos a nivel renal, gastrointestinal, cardiovascular y neurológico en los roedores que lo consumen. En EEUU esta sustancia activa fue registrada ya como rodenticida en el año 1984 y ha sido ampliamente utilizado para controlar las plagas de rata parda o de alcantarilla (Rattus norvegicus), rata negra (R. rattus) y ratones domésticos (Mus musculus). Sin embargo, en Europa su autorización llega ahora, después de una tramitación algo polémica, debido a los posibles efectos del colecalciferol en la salud humana.

Concretamente, al colecalciferol se le atribuyen propiedades de alteración endocrina, pudiendo causar efectos adversos en las personas que lo manipulan, planteando también problemas de intoxicación primaria y secundaria, aun aplicando medidas restrictivas de gestión del riesgo. A pesar de ello, su aprobación por parte de la UE se justifica en base a que, en general, presenta mejores perfiles toxicológicos y ecotoxicológicos que las materias activas anticoagulantes. En concreto, no está clasificado como Tóxico para la reproducción de categoría 1B, ni como PBT (sustancias persistentes, bioacumulables y tóxicas) ni tampoco como mPmB (sustancias muy persistentes y muy bioacumulables). Es de esperar que, cuando se emplee como rodenticida, presente menor riesgo para las personas, la fauna y el medioambiente. Aun con todo, su aprobación se limita al uso exclusivo de profesionales especializados, no comercializándose productos rodenticidas que lo contengan para el público en general.

Otras condiciones importantes que recoge dicha autorización europea son, por ejemplo, que su concentración nominal no deberá superar el 0,075 % en Peso, que los productos deberán contener un agente repelente y un colorante, que no se podrán formular los productos en forma de polvo de rastreo o que sólo se podrán comercializar aquellos con colecalciferol listos para su uso. En concreto, para los técnicos de control de plagas o personal profesional especializado, esta materia activa podrá utilizarse para tratamientos de desratización en alcantarillado, espacios abiertos o vertederos, siempre en puntos de cebo cubiertos y protegidos, para tratamientos permanentes en lugares con un fuerte grado de reinfestación (siempre y cuando otros métodos de control sean insuficientes) pero nunca en procesos de cebado intermitente.

Por tanto, Europa pone a nuestra disposición una nueva herramienta profesional para el control químico de las plagas de roedores, complementaria a los rodenticidas anticoagulantes que se emplean actualmente y que se suma a las pocas alternativas eficaces existentes a día de hoy, tanto si tenemos en cuenta los métodos físicos como los químicos. Habrá que esperar para comprobar su efectividad, pero recordamos que para eliminar las plagas de ratas y ratones de una forma rápida y segura, lo mejor es contratar los servicios de desratización que la empresa Biodal Control Ambiental ofrece en Madrid.