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Nuevos detalles acerca de la prolífica reproducción de la cucaracha americana

La cucaracha americana se reproduce asexualmente para proliferar

23 Marzo, 2017

Las cucarachas son de los insectos más conocidos, aunque sea sólo por su mala fama. La lucha contra sus plagas supone una buena parte de los tratamientos de desinsectación que se realizan en todo el mundo. Los recursos que se destinan a combatir sus poblaciones son muy elevados, los cuales se emplean para desarrollar una amplia variedad de métodos para su control. En el diseño de todas estas herramientas, sean biocidas o no, es imprescindible conocer todos los aspectos fundamentales de su biología. Por ello, podría pensarse que a estas alturas ya se sabe todo acerca de la vida de las cucarachas. Sin embargo, un estudio reciente ha puesto de manifiesto una característica de la reproducción de la cucaracha americana (Periplaneta americana) que hasta ahora se desconocía. El descubrimiento explicaría una de las causas que hace que esta especie sea tan prolífica y se haya convertido en una de las plagas con mayor incidencia en el mundo.

El estudio ha sido llevado a cabo por un grupo de investigadores de la Universidad de Hokkaido, en Japón. Según han descubierto los autores, las cucarachas hembra que cohabitan con otras hembras muestran una mayor probabilidad de que sus huevos no fecundados eclosionen, ayudando a la proliferación de la especie en condiciones desfavorables. Esto quiere decir que las hembras de cucaracha americana promueven la reproducción asexual en ausencia de machos, lo que representa una muestra de cooperación social para el mantenimiento de las colonias.

Los científicos estudiaron durante cuatro años a 11 grupos de cucarachas americanas y pudieron observar que cuando tres o más hembras se mantienen juntas, inmediatamente después de su última muda, tienden a producir ootecas (cápsulas contenedoras de los huevos) más rápido que cuando están solas. Por el contrario, cuando las hembras cohabitaron con machos a los que se extirpó previamente los genitales (con los que no pueden copular) o con otras hembras sin antenas (no pueden reconocerse entre ellas), no promovieron significativamente la reproducción, y ésta fue mucho más lenta que en el caso de las hembras aisladas. Además, se pudo observar que añadir diariamente un componente de la feromona sexual primaria para esta especie, tampoco promovió la producción de ootecas en las hembras aisladas. Esto quiere decir que las hembras alojadas en grupo promueven y estabilizan la producción asexual de ootecas. Dicha promoción se desencadena por señales quimiosensoriales femeninas, distintas de las feromonas sexuales, y que son detectadas principalmente por las antenas.

A esta forma de reproducción asexual, en la que la descendencia es producida únicamente por hembras, sin contribución genética de ningún macho, se la conoce como partenogénesis. Este mecanismo ocurre en muchos grupos animales, desde rotíferos, nematodos y distintos artrópodos, hasta algunos vertebrados como ciertas especies de lagartija. A largo plazo, no es un mecanismo demasiado exitoso, puesto que no genera diversidad genética; pero a corto plazo puede ser una estrategia útil, si hay recursos abundantes, para generar rápidamente descendientes femeninos y colonizar nuevos hábitats. La cucaracha americana sufre lo que se conoce como partenogénesis facultativa, mecanismo reproductor secundario al sexual y producida únicamente cuando no existen machos disponibles.

El estudio revela también que los grupos de hembras hacen que la partenogénesis sea un método de reproducción mucho más sostenible de lo que se creía para esta especie. A pesar de que los huevos partenogenéticos presentan una tasa de eclosión menor que la de los huevos sexuales, la sincronización en la producción e incubación de los huevos que presentan estas hembras, incrementa su aptitud de agregación y explotación compartida de recursos, contrarrestando así este efecto. Esto permite, como afirman los autores, que una colonia de 15 ejemplares sea suficiente para producir progenie femenina por un periodo de más de tres años.

Los resultados de esta investigación revelan las razones del éxito colonizador de la cucaracha americana y la dificultad que tiene el control de sus plagas; aunque seguro que estos conocimientos serán de gran ayuda para el diseño de futuras herramientas. Mientras tanto, recordamos que en Biodal Control Ambiental somos especialistas en eliminar cucarachas de ésta y otras especies.