Contacte con nosotros

Especialistas en control de plagas. Resultados garantizados, al mejor precio.

Los piojos, otro insecto plaga resistente

Los piojos, como otras plagas, también se vuelven resistentes a los tratamientos

6 Julio, 2016

No es la primera vez que hablamos sobre el fenómeno de las resistencias que presentan determinadas plagas a los diferentes tratamientos de control, principalmente químicos. La principal causa suele ser el abuso de dichos productos. Organismos sometidos constantemente a la acción de insecticidas y demás sustancias acaban haciéndose inmunes a ellos, de la misma forma que el uso indebido de antibióticos crea bacterias super-resistentes. Esto también le ocurre a una de las plagas que las empresas del sector no tratamos pero que tantos quebraderos de cabeza ocasiona, sobre todo a padres, madres, colegios y escuelas infantiles: los piojos.

El piojo del cuero cabelludo (Pediculus humanus capitis) es un insecto hemimetábolo del Orden Phthiraptera. Por tanto son ápteros, es decir, en estado adulto han perdido las alas, por lo que ni vuelan ni realizan saltos. Esto es importante remarcarlo puesto que el contagio de los piojos se produce por contacto directo entre personas infestadas o por la utilización de elementos contaminados (peines, gorras, almohadas, etc.).

En relación con estos insectos leemos una reciente noticia sobre el aumento de la incidencia de esta plaga. Lejos de reducirse, parece haber aumentado entre la población infantil en los últimos años, llegando a afectar a un 25% de los escolares, extendiéndose también a adolescentes y adultos. La razón de este incremento está por un lado en el factor social, que hace que por vergüenza muchos padres no comuniquen la infestación de sus hijos, llegando a contagiar de esta forma a otros compañeros. Hay que tener en cuenta que la falta de higiene no es responsable de su aparición en muchos casos. Pero sobretodo, es debido a la sobreutilización de manera preventiva de pediculicidas, con componentes insecticidas; de tal forma que estos insectos hematófagos se han vuelto resistentes a ellos.

A pesar de que estos productos son vendidos en farmacias, sin ningún tipo de restricción, debemos saber que el principio más empleado en los antipiojos es la permetrina, que actúa a nivel del sistema nervioso de los insectos. Los expertos indican que a largo plazo el uso de este componente puede desencadenar procesos alérgicos. Otro tipo de productos tienen como agente insecticida el malatión, un organofosforado empleado también en la agricultura y la ganadería. Sus efectos en el organismo humano pueden llegar a ser más nocivos por su mayor toxicidad. Una alternativa a todos estos productos es el uso de siliconas, que son componentes inocuos y acaban con los piojos por asfixia. Sin olvidarnos, por supuesto, del empleo de la eficaz lendrera.

De vuelta al sector de la sanidad ambiental, el fenómeno de las resistencias nos complica bastante el trabajo a las empresas de control de plagas. Una vez más, el abuso de productos químicos es el responsable. No es raro encontrarse con un cliente, por lo general perteneciente a la hostelería, con una plaga de cucaracha rubia (Blatella germanica) recurrente. La utilización de biocidas de forma preventiva ha provocado que se adapten a todo tipo de principios activos, por lo que es difícil encontrar herramientas para combatirlas. A lo sumo, se consigue disminuir la población, pero al cabo del tiempo ésta vuelve a aumentar, fundamentalmente si el cliente no sigue las recomendaciones higiénico-sanitarias o ambientales necesarias. La sobreutilización de plaguicidas también es responsable, en parte, del resurgir de la plaga de las chinches de cama (Cimex lectularius), un hemíptero cuyo control requiere de tratamientos profesionales y complejos; de tal forma que cualquier aplicación química sin fundamento puede terminar agravando el problema. El fenómeno también ocurre en la agricultura, con el abuso de los productos fitosanitarios. Aplicar dosis mayores a las especificadas por el fabricante o hacerlo en una fase inadecuada del ciclo de la plaga, puede hacer que los organismos nocivos sean, a posterior, muy complicados de controlar.

Por tanto, una vez más la solución la debemos encontrar en el desarrollo del Control Integrado de Plagas, en todos los niveles, y tanto a pequeña como a gran escala.